Domingo 11º de Tiempo Ordinario - Ciclo A
Segunda Lectura: Romanos 5,6-11
Texto |
6 Es que cuando aún nosotros estábamos sin fuerzas, entonces, en su momento, Jesús el Mesías murió por los culpables. 7 Cierto, con dificultad se dejaría uno matar por una causa justa; con todo, por una buena persona quizá afrontaría uno la muerte. 8 Pero el Mesías murió por nosotros cuando éramos aún pecadores: así demuestra Dios el amor que nos tiene. |
Notas |
La presencia del Espíritu, acaba de decir San Pablo, es experiencia del amor de Dios y fuente de una firme esperanza que no se verá defraudada: alcanzar el esplendor de Dios (Rm 5,1-5). |