Domingo 1º de Cuaresma - Ciclo C
Segunda Lectura: Romanos 10,8-13
Texto |
8 ¿Qué dice [la Escritura] entonces? Esto: «A tu alcance está la palabra, en tus labios y en tu corazón» (Dt 9,4; 30,14); la palabra, es decir, la fe que proclamamos. 9 Porque si tus labios profesan que Jesús es Señor y crees de corazón que Dios lo resucitó de la muerte, te salvarás. 10 La fe interior obtiene la rehabilitación y la profesión pública obtiene la salvación, 11 pues dice la Escritura: «Ninguno que crea en él quedará defraudado» (Is 28,16). 12 Y ya no hay distinción entre judío y griego, porque uno mismo es el Señor de todos, generoso con todos los que lo invocan; 13 porque «todo el que invoca el nombre del Señor se salvará» (Jl 3,5). |
Notas |
Pablo está tratando uno de los temas característicos de su teología, la rehabilitación por la fe. El seguidor de Jesús no se rehabilita ante Dios, no se reconcilia con Él gracias al cumplimiento de la ley, sino por la fe en Jesús, es decir, por la adhesión a su persona y a su proyecto. |