Escrito por Rafael J. G. A. | Imprimir | Visto: 445

Domingo 28º del Tiempo Ordinario - Ciclo A

Segunda lectura: Filipenses 4,12-14.19-20 

 

 

              12 Sé vivir con estrechez y sé tener abundancia; ninguna situación tiene secretos para mí, ni estar harto, ni pasar hambre, ni tener sobra, ni pasar falta; 13 siempre me siento con fuerzas, gracias al que me robustece. 14 Con todo, me habéis hecho un favor al tomar como vuestra mi dificultad.
              19 Mi Dios, por su parte, cubrirá todas vuestras necesidades con sus inagotables riquezas por medio del Mesías Jesús.
               20 A Dios nuestro Padre la gloria por los siglos de los siglos, amén.

 

          

            Pablo muestra su gratitud a los filipenses por la ayuda que le han hecho llegar a la cárcel. A Pablo no le preocupan las dificultades que comporta la misión que Dios le ha encomendado: con ella le da las fuerzas necesarias para afrontar cualquier situación. Eso no significa que no valore y agradezca la solidaridad de los cristianos de Filipos. Dios corresponderá con largueza a la generosidad que le han mostrado.
            Doxología final de la carta.