Domingo 14º del Tiempo Ordinario - Ciclo B

Primera Lectura: Ezequiel 2,2-5

 

Texto

    2 Penetró en mí el espíritu mientras me estaba hablando y me levantó en pie, y oí al que me hablaba. 3 Me decía:
     - Hijo de Adán, yo te envío a Israel, pueblo rebelde: se rebelaron contra mí ellos y sus padres, se sublevaron contra mí hasta el día de hoy. 4 (A hijos duros de rostro y de corazón empedernido te envío). Les dirás «esto dice el Señor», 5 te escuchen o no te escuchen, pues son casa rebelde, y sabrán que hay un profeta en medio de ellos.

Notas

    Vocación del profeta. Su misión procede directamente de Dios y consiste en ser su portavoz ante un pueblo que ya conoce la voluntad del Señor, pero que se ha rebelado contra ella.
    Porque la misión del profeta consiste en ser portavoz de Dios ante el pueblo, trasmitiéndole su mensaje y recordándole su voluntad. Al mismo tiempo, la presencia del profeta es testimonio de la presencia y de la solicitud de Dios por su pueblo.
    Indirectamente se afirma el respeto de Dios por la libertad del hombre que podrá hacer caso o no a la palabra del profeta.